Existen diferentes tipos de tortugas, dependiendo de su hábitat se pueden clasificar en dos grupos: tortugas de agua y tortugas tierra, dependiendo de esto las tortugas necesitarán un enriquecimiento ambiental con unas características u otro con otras características diferentes. En esta ocasión nos vamos a centrar en las tortugas acuáticas. Como las terrestres son reptiles con caparazón, tranquilos, pacíficos, se adaptan bien a vivir en nuestros hogares siempre que les brindemos el alojamiento adecuado. Suelen interactuar positivamente con los humanos, su mantenimiento es sencillo y no requiere mucho tiempo.
Los aspectos a tener en cuenta para que nuestras tortugas tengan un enriquecimiento ambiental óptimo son:
ALOJAMIENTO:
El mejor lugar para tener tortugas de agua es un acuaterrario, el cual situaremos en un lugar seguro, estable, tranquilo y accesible, al cual no debe de darle la luz directa. Nuestro acuaterrario debe disponer de dos zonas bien diferenciadas
- Zona de agua: Esta deberá ser lo más grande posible ya que nuestra tortuga pasará aquí la mayor parte del tiempo. Se recomienda que el volumen de agua para un adulto sea de 100L
- Zona de tierra seca: allí será donde las tortugas salgan recibir los rayos uva (tan importante para poder sintetizar la vitamina D) y a coger temperatura. Para conseguir esto debemos de colocar una lámpara que administre calor y rayos UV-B (puede ser mediante una misma bombilla o en bombillas separadas). Para acceder a esta zona debemos de ponerles a nuestras tortugas una rampa, si no lo hacemos estas no podrán subir.
Temperatura:
La temperatura óptima del agua será entre 25 y 28 ºC, mediante un termocalentador automático con termostato conseguiremos la temperatura deseada , ya que ellos solos la regulan, apagándose y encendiéndose en función de las necesidades del agua de nuestro acuaterrario
La temperatura de la zona de tierra seca será un par de grados superior, es decir entre 27 y 30 ºC.
Es muy importante que las tortugas no sufran cambios bruscos o extremos de temperatura
ELIMINACIÓN
El comportamiento de eliminación se lleva a cabo en la misma agua en la que nadan, por lo tanto es fundamental limpiar con frecuencia o renovar con agua limpia el acuaterrario. Una buena solución es poner un filtro en el acuaterrario (los hay externos e internos), gracias a él no será necesario cambiar el agua tan frecuentemente, ya que la mantendrá limpia durante más tiempo. Aun así será necesario cambiar el agua, en una proporción de alrededor de un 30% del contenido del acuaterrario a la semana.
El agua en la que nuestras tortugas nadan deberá estar libre de cloro para que no se produzcan daños en sus globos oculares. Hay que tener esto muy en cuenta a la hora de cambiarles el agua. El cloro puede eliminarse del agua de dos posibles formas:
-Dejándola reposar 24 horas antes de cambiarla
-Echando algún producto que lo neutralice.
DESCANSO:
La mayoría de las tortugas descansan en cualquier parte de su acuaterrario por lo que no necesitaran nada especial para dicho fin.
JUEGOS:
En la zona de agua debemos de poner decoración, esta, aparte de fines ornamentales, también recreará el hábitat natural de las tortugas. Estos elementos “decorativos” como algas, piedras (grandes para que no las ingieran), cuevas…. Les servirán para que puedan esconderse, esquivarlas, golpearlas, morderlas…
ALIMENTACIÓN:
Por regla general son omnívoras y tienen un apetito voraz, debemos preocuparnos cuando dejan de comer. Su dieta será lo mas balanceada posible, pero la base será un pienso especialmente formulado para tortugas de agua (formulación óptima: proteína 42%, grasa 10%, fibra5%, cenizas5%, humedad10%), este se administrará a diario. En menor medida podemos administrarles trozos de frutas y/o vegetales, como manzana, pera, melón, zanahoria, lechuga… se pueden administrar un par de veces por semana. La Carne y el pescado previamente cocinado y en tiras también están en el menú, aunque no se administrará más de una vez por semana
Una buena idea es poner cebo vivo, (lombrices, escarabajos, grillos, algunos tipos de peces, caracoles, saltamontes…) para que puedan cazarlo y así darán pie a sus instintos.
Ponerles algas acuáticas como el jacinto de agua, en el acuaterrario, es una forma de que tengan algo de comida ad-libitum.
Las gambitas que venden en las tiendas son chuches, por lo que solo debemos dárselas de vez en cuando.
Las tortugas comen en el agua y su comida se les administrará en la misma, esta la usarán para tragar y beber. También suelen llevarse los trozos al fondo, allí los trocearán e ingerirán. Otro motivo más por el que cuidar mucho la higiene del agua.
SOCIAL:
Hay especies más sociables y otras son más solitarias con los miembros de su misma especie.
Con otras especies no interactuarán, salvo que se vean amenazadas, ya que estaremos en nuestro acuaterrario y no nos relacionaremos con el exterior.
Las relaciones con los humanos, el tiempo y la rutina harán que nos conozcan y quizás confiarán en nosotros, pero no establecerán fuertes vínculos.
Esperamos sean de útiles estos consejillos para el bienestar de vuestras tortugas de agua y nuevamente recordaros que si tenéis dudas acudir a vuestro centro veterinario de confianza es la mejor opción.